Sembrar con generosidad


ESTUDIO # 31
Estudio de la Segunda Carta a los Corintios – 14
Sembrar con generosidad
INTRODUCCIÓN
Quizás el tema que suscita más polémica entre cristianos e incrédulos es el tema de la entrega de los diezmos, ofrendas y primicias. De repente, la verdad expresada por el Señor Jesús en Mateo 6:21 – (“Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.”) se haga más evidente cuando de este tema se trata. No todos los cristianos están libres del temor, de la avaricia o de las preocupaciones por esta vida. De los incrédulos podemos esperar que actúen repulsivamente al tema de ofrendar, pues les es natural que así actúe por su condición de “muertos en delitos y pecados”. Pero, nosotros necesitamos que el Espíritu de Dios nos ayude a comprender la verdad de este tema espiritual. Abrámosle nuestro corazón para eso.
2 Corintios 9:6-15
“6 Pero esto digo: El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra generosamente, generosamente también segará. 7 Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre. 8 Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra; 9 como está escrito: Repartió, dio a los pobres; Su justicia permanece para siempre. 10 Y el que da semilla al que siembra, y pan al que come, proveerá y multiplicará vuestra sementera, y aumentará los frutos de vuestra justicia, 11 para que estéis enriquecidos en todo para toda liberalidad, la cual produce por medio de nosotros acción de gracias a Dios. 12 Porque la ministración de este servicio no solamente suple lo que a los santos falta, sino que también abunda en muchas acciones de gracias a Dios; 13 pues por la experiencia de esta ministración glorifican a Dios por la obediencia que profesáis al evangelio de Cristo, y por la liberalidad de vuestra contribución para ellos y para todos; 14 asimismo en la oración de ellos por vosotros, a quienes aman a causa de la superabundante gracia de Dios en vosotros. 15 ¡Gracias a Dios por su don inefable!”
Temas: Alabanza, Dones/Regalos, Gracia, Gratitud, Generosidad, Renunciamiento, Servir.
COMIENCE
- ¿Qué imágenes vienen a su mente cuando oye hablar de un «dador alegre»?
- ¿Cuál es la persona más generosa que conoce? ¿Por qué cree que es así?
EXPLORE
- ¿Por qué comenzó Pablo este pasaje con una ilustración tomada de la agricultura? (v. 6).
- ¿Cómo deberíamos ofrendar? ¿Por que? (v. 7).
- ¿Cuál es la promesa de Dios a los creyentes que ofrendan generosamente? (v. 8).
- ¿Por qué razón cita Pablo aquí las Escrituras? (v. 9).
- ¿Qué provee Dios? (v. 10).
- ¿Qué resulta de la generosidad de los cristianos? (v. 11).
- ¿Cuál era el beneficio más importante que surgiría de la colecta para la Iglesia de Jerusalén? (vs. 12 al 14).
- ¿Qué les dio Dios a los corintios? (v. 14).
- ¿Por qué tipo de ofrenda alabó Pablo a Dios en esta carta? (v. 15).
ANALICE
- ¿Por qué ama Dios a un dador alegre más que a otro que ofrenda una gran cantidad de dinero de mala gana?
- ¿Qué nos dice este pasaje acerca de motivar a las personas?
- ¿Qué nos dice este pasaje acerca de la necesidad de rendir cuentas ante otros?
- ¿Qué nos dice este pasaje acerca de la relación entre la fe cristiana y las ofrendas?
- ¿Qué podría hacer un dador reacio para convertirse en un dador más alegre?
- ¿Qué diferencia tiene dar de mala gana si al fin y al cabo se cubre la necesidad?
- ¿Cómo debería reaccionar usted cuando otros cristianos ofrendan generosamente para usted o para su familia?
- ¿Qué principios acerca de la necesidad de rendir cuentas a otros deberán regir las ofrendas cristianas?
APLIQUE
- ¿Qué podría hacer esta semana para alentar a un amigo cristiano a ser un dador alegre?
- ¿Qué puede hacer para ayudarse a tener presente la generosidad de Dios la próxima vez que se sienta tentado a no ofrendar alegremente?